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Episcopologio de Ceuta

José Xiqués


Deán de Ceuta

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Lo bosquejó en dos secciones distintas, portuguesa (pág. 470) y española (pág. 25) el P. Gams en su obra doctísima Series episcoporum Ecclesiæ Catholicæ, que salió á luz en Ratisbona, año 1873. La sección portuguesa estriba en la Lusitania sacra de Figueiredo y en la Memoria histórica sobre los obispados de Ceuta y Tánger (Lisboa, 1858). La española en un manuscrito anónimo, que obtuvo el P. Gams por mediación del Sr. Martín, catedrático de Palencia. No fueron desconocidos al sabio benedictino alemán los nueve historiadores de Ceuta, que reseñó nuestro inolvidable compañero D. Tomás Muñoz en su Diccionario bibliográfico-histórico (Madrid, 1858); mas no le sirvieron. «Quorum opera, dice, de episcopatu ipso ne unum quidem tractat». Tampoco acertó el P. Gams á conocer, ó indicar, otras fuentes de la sección española en el Suplemento que añadió en Munich (año 1879) á su obra magistral é intituló Hierarchia catholica, Pio IX pontifice   —402→   romano. Sin embargo, no debía ignorar que al siguiente año (1859) de haberse dado á luz el Diccionario del Sr. Muñoz, se estampó en Madrid la Historia de Ceuta, cuyo erudito autor, D. José Márquez de Prado, trazó la serie ordenada de los obispos de aquella ciudad, con observaciones muy estimables, desde el principio de la dominación portuguesa en Ceuta hasta el de este siglo.

En los dos primeros cuadernos de nuestro BOLETÍN, correspondientes á Enero y Febrero de este año1 se han abierto sobre esta cuestión nuevos horizontes á la exploración científica. El gran misionero de Rusia y de la Tartaria, Fray Lorenzo de Portugal, vuelto de su gloriosa expedición, era obispo de Ceuta en 1266; y es muy posible que se descubran antecesores y sucesores suyos en esta dignidad durante los siglos XIII y XIV. Al envío de los sobredichos cuadernos del BOLETÍN y al ruego que le hice de ilustrar por su parte el Episcopologio de aquella Santa Iglesia, ha correspondido su dignísimo Deán, D. José Xiqués, con la Memoria adjunta que he anotado brevemente.

Madrid, 7 de Marzo de 1890.

FIDEL FITA.






ArribaAbajoObispos y administradores apostólicos de Ceuta

Antes del siglo XV no veo memoria de ningún Prelado de esta Santa Iglesia, que esté consignada en sus archivos. No debe sorprender que D. Alfonso el Sabio hubiese proveido en 1266 con obispo franciscano á la cristiandad de esta población, que á principios del siglo XIII, era ya florentísima, según aparece en las actas de los mártires, cuya translación á Coimbra se ennobleció con la vocación á la orden franciscana de San Antonio de Padua. El Santo, quiso venir á fertilizar con el sudor de su labor evangélica la misión del imperio marroquí. Las tempestades lo impidieron; pero el celo apostólico de franciscanos y dominicos, las redentoras religiones de la Santísima Trinidad y de Nuestra Señora de   —403→   la Merced, la política y el comercio de las naciones cristianas, cuyo interés nunca dejó olvidada esta postrera y más occidental porción del África, y mucho menos esta columna y llave del Estrecho Hercúleo, dan motivo suficiente para creer que no serán estériles los esfuerzos de los que con ojo perspicaz y amigo de la verdad logren consultar, mejor que yo, claras y copiosas fuentes.

Conquistada Ceuta, el día 14 de Agosto de 1415, por D. Juan I de Portugal, luego que el invicto rey aseguró la posesión y defensa de la plaza, fué su primer cuidado el de la religión. Para llevar á cabo sus piadosos deseos, hizo purificar la mezquita mayor y convertirla en iglesia, que es hoy la catedral, con título de parroquia. Y queriendo que fuese Ceuta capital de sus futuras conquistas en el África solicitó de Eugenio IV la erigiese en cátedra episcopal; lo cual tuvo lugar por bula expedida en 1432. Para trazar el episcopologio me he valido de varios documentos que se conservan en la secretaría de cámara del obispado y en el archivo del Ilustrísimo Cabildo catedral, no sin aprovecharme de dos obras, que veré de ampliar y rectificar: la Historia de la plaza de Ceuta que en 1859 publicó D. José A. Márquez de Prado; la Series episcoporum Septensium del P. Gams; cuyo doble catálogo me ha proporcionado en copia de su puño y letra el sabio P. Fita, indicándome que mi estudio no dejará de aprovechar á la España Sagrada.


1. Don Fray Aymar, inglés

Fué religioso franciscano y confesor de la reina D.ª Felipa, esposa de Juan I de Portugal2. Obispo de Marruecos en 10 de Mayo de 1413, seguía obteniendo la misma dignidad en 1421, según se desprende de una bula del papa Martino V. En 1432 lo trasladó Eugenio IV á Ceuta, al restaurar esta Sede. Amaro lo nombra Márquez3; con este nombre es conocido en los manuscritos de la catedral.

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Sobre el año 1420 ha notado Wadding4 que Martino V por su bula «In eminenti specula», accediendo á la petición del Infante D. Pedro, duque de Coimbra, otorgó que los franciscanos pudiesen recibir el convento que dicho Infante se disponía á construirles cerca de la ermita de Santiago en Ceuta. La bula se expidió en Florencia á 2 de Junio. Por otra del año siguiente (Roma, 8 Junio 1421) se ve que no sufrió demora la construcción del edificio.




2. D. Juan Manuel

Hijo (natural?) del rey D. Duarte I y confesor de su hermano el renombrado Alfonso V de Portugal. Profesó la regla carmelitana. En 1443 era obispo de Tiberiades in partibus infidelium; en cuyo año, á 20 de Julio, fué provisto en obispo de Ceuta, donde tomó el título de primado del África. Se dice que por causa de una pestilencia gravísima que afligió á nuestra ciudad, fueron quemados los archivos de su catedral como medida preventiva contra el contagio. En 14 de Enero de 1459 fué trasladado á la sede portuguesa y episcopal de La Guardia, sucesora de la Egitana. Falleció en su convento carmelitano de Lisboa, año de 1476. Sucedióle en La Guardia D. Juan Alonso Ferraz; á quien el P. Gams hace asimismo obispo de Ceuta; pero no consta en nuestros catálogos que lo fuese.




3. D. Fernando de Silva

Nieto del marqués de Govea.




4. D. Diego Ortiz de Calzadilla

Confesor del rey D. Juan II de Portugal. Era obispo de Ceuta en 1467. El rey D. Juan II le confió el encargo de formar una   —405→   junta, compuesta de los hombres más sabios del país lusitano, que examinasen los proyectos de Cristóbal Colón para descubrir el Nuevo Mundo. El dictamen de la Junta fué, como es sabido, desfavorable; mas no desalentó al futuro almirante de las Indias.




5. D. Fr. Justo Baldino

Religioso dominico. Fue Nuncio apostólico en Portugal. Murió después del 26 de Abril de 1493.




6. D. Juan de Noroña y Meneses

Era hijo de D. Fernando, segundo gobernador de esta plaza, y D.ª Beatriz; y nieto por línea materna del esforzado primer gobernador y celebérrimo D. Pedro de Meneses, primer conde de Villarreal y alférez mayor del reino lusitano. En 1494 fué nombrado Cardenal por Alejandro VI.




7. D. Pedro Fernando de Almeida

De nación portugués. Fué uno de los tres jueces, que designó Alejandro VI para ver la causa de anulación de matrimonio, tocante al rey Luís XII de Francia en 1498. Murió, poco después, de ponzoña que le dieron.




8. D. Fr. Enrique de Coimbra

Era obispo de Ceuta en 30 de Enero de 1505. Murió en 14 de Octubre de 1532.




9. D. Fr. Diego de Silva

Religioso franciscano, confesor del Rey é inquisidor mayor de   —406→   Portugal. Fué seis años obispo de Ceuta. Trasladado á Braga en 1540, murió en el siguiente año por Diciembre.




10. D. Diego de Lancaster

Empezó su episcopado en 9 de Octubre de 1545. En 1553 hizo constituciones sinodales. Envió á D. Melchor Cornelio, portugués, por su delegado al concilio de Trento. Falleció en 12 de Marzo, de 1569.




11. D. Fr. Francisco Cuaresma

Habiéndose en él juntado (9 Junio, 1570) las dos diócesis de Tánger y Ceuta con el título de esta última, formó varios estatutos para el mejor gobierno de su Iglesia. Era franciscano.




12. D. Manuel de Ciabra5

Abrió su primera visita pastoral en el mes de Julio de 1578; hizo la segunda en Junio de 1579; y la última en Mayo de 1582, señalando en ella los casos reservados al prelado de la diócesis. Formó además en 1580 unos estatutos, para el Cabildo, que en parte todavía se observan, y se imprimieron en portugués, conservándose en el archivo de la catedral un ejemplar de ellos.




13. D. Diego Correa6

Visitó su obispado de Ceuta en Junio de 1588 y en 6 de Mayo de 1591. En 1595 fue trasladado á Portalegre.



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14. D. Héctor de Valladares7

En 1599 regía esta diócesis, según consta del libro primero, escrito en portugués, archivado en la Catedral. Murió en Gibraltar, y su cadáver fué trasladado á esta plaza y sepultado en la Iglesia mayor.




15. D. Jerónimo Govea

Gobernaba la diócesis en 1602.




16. D. Agustín Rivero

Confirmó los Estatutos de la Santa hermandad de Nuestra Señora de África, que se conservan escritos en pergamino é idioma portugués, en la sacristía del santuario de Nuestra Señora, y están aprobados por dicho prelado en Ceuta á 22 de Julio de 1605; y en ellos se titula Obispo de Ceuta y Tánger. Neciamente lo antepone Márquez8 al Sr. Valladares.




17. D. Antonio de Aguiar

Consta era Obispo de esta diócesis en el año 1618, por un auto que se conserva en el archivo catedral, fechado en dicho año, escrito en idioma portugués. Abrió su visita pastoral en 28 de Enero del siguiente; los mandatos, disposiciones y acuerdos tomados en ellas, así como los dictados por los ilustrísimos señores   —408→   Ciabra y Correa, sus predecesores, no se han traducido en castellano. Ocupó la silla hasta el año 1622.




18. D. Gonzalo de Silva

Gobernó esta diócesis desde 1633 hasta el 26 de Febrero de 1645, que falleció en esta ciudad, dejando entre otros recuerdo de su pontificado, la cruz grande que se conserva en la catedral, digna de recomendarse por su belleza artística. Fué sepultado catedral, la iglesia de Nuestra Señora de África.




19. D. Alonso de la Palma

Último Obispo de esta diócesis nombrado por la Corona lusitana en Enero de 1647. Se cree no residió en su iglesia; pues consta que Felipe IV, como rey de Portugal, escribió al Ilustrísimo Cabildo catedral para que se nombrase gobernador. Del mismo rey es otra cédula muy expresiva que Márquez9 incluye en su Historia.

La acumulación de guerras que, por esta época venía sosteniendo España; los desastres y crecidos gastos de la dinástica que mantuvo en Portugal por tantos años, sin despojar al duque de Braganza del trono, que de hecho poseía; la debilitación progresiva de la monarquía, con tantas y tan diversas contrariedades, dieron lugar, sin duda, á que esta Iglesia permaneciera abandonada y sin pastor, larguísimos años, que estuvo vacante su silla episcopal; hasta que terminadas las diferencias entre ambas naciones y firmada la paz, reconociendo D.ª Ana de Austria todos los derechos á Portugal y cediéndole todas sus posesiones, reservándose para España la plaza de Ceuta, vino á esta ciudad el primer Obispo nombrado por la Corona de Castilla.





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20. D. Antonio Medina Chacón Ponce de León

Tomó posesión de su Iglesia en 4 de Agosto de 1677; posesionado de ella y reconociendo que el templo catedral se hallaba ruinoso y próximo á desplomarse por su mucha antigüedad, mandó demolerlo y trasladó la catedral á la iglesia de Nuestra Señora de África; donde estuvo establecida, por el dilatado espacio de cincuenta años, que duró la reedificación del nuevo templo. En su pontificado practicó varias veces la visita pastoral; y dió muchas disposiciones de buen gobierno en el año de 1680, y otras referentes á fiestas y su observancia, diezmos, juramento, judíos, estatutos del cabildo y reglas para el coro. Fué nombrado gobernador y capitán general de esta plaza, cargo que desempeñó hasta 1681, que fué trasladado á la diócesis de Lugo y después, á la de Cartagena y Murcia.




21. D. Juan Bautista Arambures

Electo para esta silla á fines de 1681. No sé que haya otros antecedentes.




22. D. Juan de Porras y Atienza

Rigió esta iglesia desde 30 de Junio de 1682 hasta 20 de Octubre de 1683, que fué trasladado á la mitra de Coria. Durante su corto gobierno en la diócesis, confirmó las disposiciones de su antecesor, señor Chacón, y dictó otras de buena administración y régimen.




23. D. Luís Aillón

Fué nombrado á fines de 1683. No se encuentran otras noticias de este ilustrísimo prelado.



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24. D. Antonio Ibáñez de la Riva Herrera

Tomó posesión en 6 de Junio de 1685. Entró en esta plaza el 28 de Julio del mismo y fué promovido al arzobispado de Zaragoza para donde salió en 23 de Mayo de 1687. En el mismo año de posesionarse de su silla, dió principio á la construcción de la nueva catedral en el mismo solar donde estuvo la antigua. Durante su pontificado formó unas reglas para el coro y, dió sabias disposiciones. Su gran talento, su prudencia, bondad y demás relevantes dotes que le distinguían, le elevaron á los encumbrados puestos de Presidente de Castilla, Inquisidor general y Virrey de Aragón. Falleció en Madrid electo Arzobispo de Toledo.




25. D. Diego Ibáñez de Lamadrid y Bustamante

Freire de Santiago. Tomó posesión en 23 de Agosto de 1685, y en este año continuó las obras de la nueva catedral que las dejó hasta techarla. Murió en esta ciudad el 5 de Abril de 1694; dejando á su Iglesia ricos ornamentos, colgaduras, alhajas, pinturas y su báculo pastoral de plata. Con fecha de 23 de Enero de 1686, dió el decreto mandando observar las reglas de coro, que escribió para este Ilmo. Cabildo las cuales se hallan en el Libro 2.º de santas visitas, del folio 50 á 82.




26. D. Vidal Marín

Natural de Mora en el arzobispado de Toledo, Inquisidor mayor de Salamanca; Magistral que fué de Santo Domingo de la Calzada, y Lectoral de la metropolitana de Sevilla. Gobernó esta diócesis, desde 9 de Noviembre de 1695, en que se posesionó de ella, hasta 24 de Mayo de 1705. En Abril del mismo fué nombrado Inquisidor general. Falleció en Madrid el 10 de Marzo de 1709 y su cadáver fué conducido según su última voluntad, al templo   —411→   de la Virgen de África donde se halla sepultado. Este insigne prelado, en medio de la inquietud consiguiente al obstinado asedio que, por entonces sufría la plaza; pastor espiritual de este redil, iba de una á otra parte llevando consuelos, animando á todos con una unción evangélica, que producía resignación, fe y entusiasmo; predicando y describiendo el deber de seguir las huellas que en su suerte corriera la corona castellana; é inculcando, en todos el sacrificio de la vida, si necesario fuese, en defensa de la plaza, de la religión y de la honra de España, pues que los moros por tierra y los ingleses por mar, cuya codicia no se hallaba satisfecha con la reciente usurpación de Gibraltar, trataban de apoderarse de Ceuta: entre tanto el incansable prelado no descuidaba á su vez, la reparación de los templos que sufrían grandes desperfectos y frecuentes deterioros, con los continuos disparos del cañón sarraceno; tanto que en medio del incesante estruendo de la guerra, se trabajaba con la tranquilidad y detenimiento, como si se disfrutaran las paces de Octavio, para que el culto no sufriese menoscabo. El egregio Obispo invertía cuantos recursos podía haber, en la construcción de bóvedas, á prueba de bomba, sobre la iglesia de Nuestra Señora de África; mereciendo por su celo, actividad y patriotismo le recompensara el Rey D. Felipe V.




27. D. José Solvada

Abad de Covarrubias. Electo en 1709 para esta silla, sin tomar posesión de ella, fué promovido al arzobispado de Lima. En la historia de Ceuta se le llama á este obispo Antonio de Zuloaga y Covarrubias; siendo las mismas fechas y antecedentes.




28. D. Sancho de Velunza y Corcuera

Tomó posesión de esta Iglesia en 24 de Abril de 1714. Fué Colegial mayor de San Ildefonso de Alcalá de Henares, Canónigo é Inquisidor de Cuenca. Este ilustrísimo prelado hacia aplicación de cuanto peculio podía haber á la reparación y ornato de los   —412→   templos. Compró el terreno para edificar la iglesia de los Remedios; cuya primera piedra colocó el 5 de Mayo de 1715; haciendo que los trabajos marchasen con tal actividad, que el año siguiente dijo el insigne prelado la primera misa, erigiéndola en ayuda de parroquia, y nombrando para cura de ella á un Canónigo de la catedral. Durante su pontificado reedificó la iglesia de África, continuó las obras de la catedral, dió reglas para el coro y dictó varias disposiciones sobre residencia canónica, distribuciones, de Vita et moribus y otras de buen gobierno. En Setiembre de 1716 fué trasladado á la mitra de Coria; desde cuya diócesis, envió muchos ornamentos y alhajas para la iglesia de los Remedios, pensionándola con una renta anual para su culto y sostenimiento.




29. D. Francisco Laso de la Vega

Religioso de la orden de Santo Domingo y Prior del convento de Guadix. Tomó posesión de este obispado en 2 de Mayo de 1717. En su gobierno terminó los adornos y decorados de la iglesia de los Remedios; colocó en ella algunas imágenes de regular mérito artístico: y fué trasladado á la silla de Palencia á mediados del mes de Enero del año 1721.




30. D. Tomás de Agüero

Colegial de San Ildefonso de Alcalá, Canónigo lectoral de las catedrales de Cádiz y Sevilla. Tomó posesión en 13 de Noviembre de 1721. Durante su pontificado amplió la iglesia de Nuestra Señora de África, concluyó la catedral, que por espacio de treinta años estuvo sirviendo para acuartelamiento de tropa: siendo de notar la original coincidencia, que la abertura de cimientos y la terminación de las obras, se efectuase por nietos de unos mismos abuelos; colegiales ambos de un mismo colegio y los dos Obispos de Ceuta, promovidos al arzobispado de Zaragoza. Abrió los cimientos para la nueva iglesia del convento de la Santísima Trinidad: reedificó la ermita de San Antonio y concluyó la capilla   —413→   de Santiago, situada en la Plaza de Armas: reformó los estatutos del cabildo y las reglas de coro. Fué promovido al arzobispado de Zaragoza, en 16 de Febrero de 1727.




31. D. Fr. Tomás del Valle

Religioso de la orden de Predicadores, Maestro y Prior del convento de Cádiz. Tomó posesión de este obispado en 1.º de Mayo de 1728. Durante su gobierno dió varias disposiciones sobre culto, aseo y régimen de la Santa Iglesia, y su personal. Su bondad y unción evangélica le captaron la estimación de sus diocesanos. En 13 de Febrero de 1731 salió de esta plaza, con general sentimiento de todos, para posesionarse de la diócesis de Cádiz á la que fué trasladado.




32. D. Andrés Mayoral

Colegial mayor de San Ildefonso de Alcalá y Canónigo de las catedrales de León y de Sevilla. Tomó posesión de esta diócesis en 22 de Julio de 1731; entrando á ocupar su silla en 12 de Noviembre del mismo año. Era muy devoto del Santísimo Sacramento y edificó á sus expensas la capilla del Sagrario de la Santa Iglesia catedral; construyendo su bóveda, á prueba de bomba, y decorándola con el retablo y las pinturas que la adornan; embelleció el templo con nuevos altares, pinturas y colgaduras: hizo la sala capitular; ensanchó el coro, arregló la sillería, y mejoró la sacristía, hizo, en fin, muchas é importantes mejoras en todas las iglesias, que sería prolijo enumerar; mandó construir un monumento para los oficios de la Semana Santa; formó los Estatutos modernos para el Ilmo. Cabildo. Fué promovido al arzobispado de Valencia y salió de esta para posesionarse de su nueva silla, en 5 de Marzo del año de 1738.



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33. D. Miguel de Aguiar de Padilla

Cura propio de San Juan de Madrid. Fué nombrado Obispo de esta diócesis en Mayo de 1738, por la Magestad de Felipe V, á consecuencia de un hecho heroico de valor y de fe. Un voraz incendio se apoderó del templo parroquial de San Juan Bautista de Madrid: llegando ya las llamas al Sagrario sin que hubiese esfuerzos humanos á contenerlo. Entonces el párroco señor de Aguiar se arrojó al fuego, y atravesando por sus colosales llamas extrajo el Sacramento, sin lesión alguna, con asombro de la muchedumbre que lo presenciaba. Noticioso el Rey de este hecho, quiso premiar al sacerdote Aguiar su heroico valor y ardiente fe; y llamándole á su presencia, le confirió la mitra de Ceuta, que acababa de vacar, y única vacante que á la sazón había. Tomó posesión de ella en 21 de Julio del expresado año. Era humilde, caritativo, afable y piadoso, y aplicaba gran parte de sus rentas á la realización de algunas obras piadosas y benéficas. Durante su pontificado dió algunas disposiciones de buen gobierno y otras sobre horas canónicas, coro y su régimen, culto y demás pertenecientes al divino oficio en la Santa Iglesia catedral. Confirmó todos los mandatos y acuerdos de sus antecesores, y falleció en esta ciudad en 14 de Febrero del año 1743.




34. D. Martín de Barcia

Dignidad de la catedral de Mondoñedo, prelado doméstico de Su Santidad, asistente al Solio Pontificio. Tomó posesión de esta diócesis en 24 de Abril de 1744; vino á ocupar su silla el 8 de Mayo de 1745. En su pontificado dió muchas disposiciones de buen gobierno. Formó los aranceles para la administración de Sacramentos, funciones votivas, funerales y otras. Reformó las cofradías del Santísimo, Concepción, Rosario, San Antonio y Ánimas. En 1746 formó el ceremonial que había de usarse en la toma de posesión del Comandante general de la plaza cómo debía   —415→   recibírsele en la catedral, cuando asistiera á las funciones de ella; señaló su asiento y el del municipio, el que debe ocupar la señora del general y el designado al Teniente de Rey. En 1751 dispuso que las dos canongías que vacaren primero, la una se erigiese en Doctoral y la otra en Magistral. En 1752, reparó á sus expensas la iglesia de Nuestra Señora de África; la consagró, decoró, pintó y costeó el retablo de su altar mayor, regaló varios ornamentos y alhajas destinados para el culto de la misma. El Rey D. Felipe V mandó que á este prelado se le facilitasen caudales y con ellos reedificó la ermita de la Virgen del Valle, medio destruida por haber servido de lazareto, ampliando las habitaciones contiguas. Reparó también varias casas que habían servido de Sagrario, botica, hospital de bubosos y aplicadas á otros usos, y repartió á todas las iglesias ornamentos correspondientes á los que se habían perdido por la confusión y desorden que hubo en la ciudad durante el mortífero período de la horrible y aterradora epidemia del Bubón. Buen ministro del Señor, fomentaba los principios evangélicos, llenando de unción con su virtud y piedad. Fué trasladado á la silla de Córdoba, saliendo de esta plaza para posesionarse de su nueva diócesis, en 21 de Octubre de 1755.




35. D. José de la Cuesta y Velarde

Colegial mayor y Canónigo de la catedral de Murcia. Se posesionó de su silla el 26 de Agosto de 1756. Este prelado desarrolló con unción las luces de la religión y de la moralidad: se ocupaba constantemente en dirigir la palabra á los fieles desde la cátedra del Espíritu Santo, y casi diariamente pasaba muchas horas en el confesonario, en la iglesia de San Francisco. Estableció conferencias morales en la iglesia del Hospital Real: ordenó que varios sacerdotes fuesen á los cuarteles del presidio, todas las tardes, á trazar á los presidiarios el camino de las buenas obras y los horrores del crimen para que se arrepintiesen de los suyos y comprendiesen el camino de la virtud. Dispuso que un sacerdote subiera á la ermita de San Antonio á celebrar el santo sacrificio de la Misa los domingos y días festivos para que la oyeran   —416→   los presos detenidos en la ciudadela del Hacho. Trasladó la cofradía del Rosario, desde la catedral á la iglesia de Nuestra Señora de los Remedios. Dió muchas disposiciones de buen gobierno; y salió de esta plaza en 9 de Abril de 1761, para trasladarse á Sigüenza, cuya diócesis se le había confiado.




36. D. Antonio Gómez de la Torre y Zavarieta

Colegial de San Ildefonso de Alcalá y Canónigo de Sigüenza y de Granada. Tomó posesión en 7 de Marzo de 1762. La mendicidad vergonzante pululaba dentro de los muros de la ciudad y este prelado con mano pródiga la remediaba en cuanto su peculio lo permitía, cubriendo muchas veces la desnudez, y satisfaciendo otras la necesidad, con el pan de la caridad. Practicó su santa visita pastoral y dispuso se cantara un responso el primer día de cada mes, no impedido por las sagradas rúbricas. Quitó las azoteas de la catedral cubriéndolas de vigamen de mucha resistencia. Reparó muchas iglesias y costeó de su peculio la reparación de otras: bendijo el nuevo templo de San Juan de Dios, que acabó de construir con el auxilio de sus rentas. Esta capilla, ó templo empezó á edificarse en el pontificado del señor Barcia, quien puso la primera piedra, con la asistencia del Gobernador de la plaza y de la guarnición de ella; no pudiendo terminarla por su traslación á la nueva diócesis á que se le había destinado. Por último el Sr. Gómez ornó la iglesia con retablos y accesorios. Fué trasladado á la diócesis de Jaén, abandonando esta el 15 de Mayo de 1770.




37. D. José Domingo de Rivera

Tomó posesión por poderes conferidos al Ilmo. Sr. Dean de esta Santa Iglesia, en el día 9 de Octubre de 1770, falleciendo en Sevilla sin posesionarse personalmente, el 23 de Enero de 1771.



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38. D. Manuel Fernández de Torres

Dignidad Prior de las ermitas de la catedral de Sevilla y Vicario de Madrid, donde se consagró para esta diócesis, en 17 de octubre de 1771, tomando posesión de su silla el 31 del mismo. Con solícito afán, luego que se posesionó de ella, conociendo las escasas rentas que el cabildo catedral y la fábrica tenían, trató de escogitar un plan que proporcionase algunos recursos para desahogar y mejorar la condición de aquellos objetos encomendados á su religioso celo; mas fracasaron sus proyectos porque falleció en 6 de Septiembre de 1773, siendo sepultado en la catedral.




39. D. Felipe Antonio Solano

Canónigo penitenciario de la colegiata del Real Sitio de San Ildefonso de la Granja. Fué electo Obispo y consagrado en Madrid en 6 de Junio de 1774, y tomó posesión de esta silla el 16 de Agosto del mismo año. En su pontificado practicó una visita general que la empezó en 21 de Julio de 1776 y la terminó en 17 de Noviembre de 1778; saliendo el 20 del expresado mes y año para ocupar la de Cuenca, á donde fué trasladado.




40. D. Fr. Diego Martín

Religioso Provincial de la Orden de San Francisco, y observante de Extremadura, tomó posesión de esta Iglesia el 26 de Mayo de 1770. Miró con particular predilección todo cuanto confiado estaba á su sagrada administración: su celo y caridad para socorrer con mano pródiga las necesidades de sus diocesanos, hasta carecer muchas veces el virtuoso prelado de lo necesario, le granjearon el aprecio de todos. Practicó su santa pastoral visita en Mayo de 1782, y siendo nombrado para la mitra de Coria; salió de esta plaza en 30 de Mayo de 1785, con sentimiento general de todos sus moradores.



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41. D. Fr. Domingo de Benaocaz

Religioso capuchino. Este prelado, recomendable por su piedad, lo fué aún más por su celo apostólico y por los beneficios que, con mano incógnita, le gustaba dispensar. Tomó posesión de su obispado el 27 de Abril de 1786, y entró en esta plaza el 21 de Mayo siguiente. Abrió su primera visita pastoral en 6 de Mayo de 1787, tan detenida y escrupulosamente practicada, como no se hizo otra por ninguno de sus antecesores. Dió las más sabias disposiciones sobre culto, ornato y aseo de los templos, cabildo, párrocos, clero, archivos, pías memorias, fundaciones, censos, capellanías, rentas, fábrica, colecturía, etc. Giró otra visita general en 1791, ocupándose en ella de las capillas del Hacho, San Antonio, Hospicio, Hospital Real, Oratorio de la Comandancia general, capillas castrenses de los regimientos y clero de ellas, iglesias del Valle, Santa Catalina, San Juan de Dios, Misericordia y Santiago. En 1796 costeó á sus expensas el retablo en lienzo para el altar mayor de los Remedios, y las colgaduras de damasco que adornan el presbiterio y pilastras de la nave. En 1797 practicó tercera visita general en la forma y con el detenimiento que las anteriores, dando nuevos aranceles y reformando las cofradías y hermandades. En 8 de Enero de 1804 practicó su cuarta y última general visita, que terminó en 26 de Noviembre de 1810. Muchos valiosos é inolvidables recuerdos tiene y conserva esta Iglesia del glorioso y largo pontificado del virtuoso Obispo, pues regaló á la catedral las colgaduras que cubren la capilla mayor, y que con las que regaló á la iglesia de los Remedios le costaron 25.000 reales; una preciosa custodia de plata dorada para llevarla á mano; un terno blanco de tisú de oro, que le costó 24.000; doce capas encarnadas, para los capitulares en las procesiones, le costaron 9.000; la campana mayor de la torre, invirtiendo además en varias obras de reparación y ornato en otras iglesias la suma de 60.000. A la iglesia de los Remedios, con el retablo y colgaduras de que llevo hecho mérito, regaló también una custodia de plata y manifestador hecho de la misma materia, y otros varios   —419→   objetos, alhajas y ornamentos destinados al culto de esta Iglesia y al de la de África. Ocupó esta silla episcopal veinticinco años; falleció el 16 de Diciembre de 1811, siendo sepultado en la catedral bajo la lámpara del crucero. Asistió á su entierro y honras el señor obispo de Laodicea10, que se hallaba en esta plaza accidentalmente.




42. D. Andrés Esteban y Gómez

Canónigo de la catedral de Sigüenza, siendo Diputado á Cortes en 1814. El Rey D. Fernando VII, á su regreso de Francia, le nombró Obispo de esta diócesis, tomando posesión de ella en 13 de Junio de 1816. Abrió su santa pastoral visita el 16 de Noviembre del expresado año, terminándola el 25 de Marzo de 1817. En 8 de Abril siguiente salió de esta para la silla de Jaén, que se le había conferido. En los diez meses que gobernó esta Iglesia dió pruebas de devoción y piedad, asistiendo constantemente á los oficios Divinos, estableciendo los ejercicios de San José el 19 de cada mes, y disponiendo que la novena de Nuestra Señora de África se celebrase con su Divina Magestad manifiesto. Fué muy afecto al cabildo, cuyos individuos todos le acompañaban á pasear por las tardes; trató con afabilidad y cariño á todos los eclesiásticos, y acostumbraba, una vez cada mes, que los no presbíteros fuesen á comulgar á su capilla, de su propia mano, con los cuales almorzaba después como si fuera un padre con sus hijos. Como prueba de sus buenas prendas personales y notable honradez damos á conocer el siguiente hecho: Al abandonar esta plaza para trasladarse á su nueva diócesis, antes de posesionarse de ella pasó á la Corte á dar gracias al Rey por la merced que acababa de recibir de su munificencia, haciéndole presente á la vez el estado de la Iglesia que dejaba, consiguiendo para ella una pensión de 80.000 reales anuales.



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43. D. Fr. Rafael de Vélez

Religioso capuchino, lector de su Orden, natural de Vélez Málaga y autor de las obras tituladas Preservativo contra la irreligión y Apología del altar y el trono. Tomó posesión de esta silla en 15 de Noviembre de 1817. Abrió su santa general visita en 18 de Agosto del siguiente año. Durante su pontificado desplegó este sabio y virtuoso prelado todo su celo evangélico en bien de la Iglesia que se le tenía confiada; mejorando los templos, fomentando el culto y arreglando las costumbres de sus diocesanos, conduciéndoles por la senda de la virtud. Visitó detenidamente la Iglesia catedral y todas las capillas, ermitas y santuarios de la ciudad; dictando acertadas disposiciones para su conservación y reparo de los edificios, ornamentos y utensilios destinados al culto de las mismas. Restableció los entierros llamados de parroquia, prohibió la celebración de los matrimonios en las casas particulares, el uso de sillas en las iglesias y el que las mujeres entrasen en ellas descubierta la cabeza; mandó que en los Remedios se cantara la misa parroquial todos los domingos y días festivos; dispuso que la sala capitular no sirviera más que para la celebración de los cabildos; formó nuevos aranceles y reformó las hermandades y cofradías; estableciendo conferencias morales tasa el estipendio de cuatro reales en las misas, manda que se use por todos los eclesiásticos, sujetos á su autoridad, el traje talar y no se les permita celebrar en las iglesias donde se presenten sin sotana. En 22 de Abril de 1824 puso un notable auto sobre distribuciones cuotidianas, último decreto que autorizó en esta diócesis, pues en el siguiente Mayo abandonó su silla para trasladarse á la de Burgos, á la que fué promovido, y antes de posesionarse de aquella archidiócesis fué nombrado para gobernar la metropolitana de Santiago. Siendo arzobispo de Compostela regaló á esta su primera iglesia un terno blanco de tisú de oro, dos incensarios con naveta, cuatro faroles para las andas de la custodia del día del Corpus, la pértiga de plata, y otros objetos para el servicio de esta Santa Iglesia.



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44. D. Fr. Francisco García Casarrubios

Fué nombrado para gobernar esta diócesis en 1825 y sin tomar posesión de su silla le confirió el Rey la mitra de Tuy.




45. D. Fr. Pablo Hernández

Religioso de 14 orden de Trinitarios Calzados. Tomó posesión de esta diócesis en 9 de Octubre del año 1826. En su pontificado hizo el presbiterio actual de la catedral, dándole mayor extension que tenía anteriormente; colocó nuevas verjas en el altar mayor y coro; construyó nueva mesa de altar y el tabernáculo, con sus esculturas de los Evangelistas y pintó el cuadro de la Asunción que sirve de retablo; puso nuevos púlpitos para las epístolas y evangelios y se colocó el púlpito para la predicación. Estableció una Academia de Moral y Liturgia, obligando á todos los clérigos desde la primera tonsura hasta el presbiterado inclusive, á asistir á ella diariamente, excepción hecha de los individuos del cabildo. Confirmó la designación de asientos que corresponden ocupar al Gobernador de la plaza, al municipio, al teniente de Rey y á la señora del Gobernador, hecha por su antecesor Ilmo. Sr. Barcia. Mandó que los maitines y laudes se rezaran inmediatamente después de completas, y no transcurrida media hora, como se tenía dispuesto por sus ilustres predecesores; toleró se rezaran las misas de ferias y de vigilias, que se cantaban hasta entonces, como se acostumbra en todas las iglesias catedrales; visitó la iglesia catedral, la de África, Misericordia, San Juan de Dios, iglesia de la Trinidad, la de San Francisco, Hospital Militar, Remedios, Hospitalito, Valle, San Antonio, capilla del Hacho, capilla del Presidio y oratorio de la Comandancia general; advirtiendo y corrigiendo, en lo posible, las faltas y defectos más notables que encontraba en ellas. Trabajó con celo apostólico en bien de la diócesis que le estaba encomendada. Falleció en esta plaza en 21 del mes de Julio de 1829; siendo enterrado en la Santa Iglesia catedral.



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46. D. Juan José Sánchez Barragán y Vera

Canónigo doctoral de la Primada de Toledo; tomó posesión de esta mitra en 8 de Octubre de 1830; abrió su santa visita en 7 de Septiembre del siguiente año. En su pontificado dió varias disposiciones de buen gobierno, mereciendo el honroso dictado de «Padre de los pobres» por su grande caridad para con ellos y su constante afán en socorrerlos. Reformó los aranceles del cabildo y parroquiales; dió los que habían de regir en el Tribunal eclesiástico; reformó asimismo, las hermandades de San Pedro (agregando á esta la cofradía de Ánimas), Rosario, San Antonio, San José, Santa Bárbara, Carmen, Remedios, Valle, Victoria, Santiago, Santísimo y Jesús. Mandó se cantaran en la catedral las dos misas de Tercia y Feria ó vigilia, cuando las hubiera. En 1834 fué presentado para la silla de Osma, por el Gobierno de la Regencia, en la menor edad de Doña Isabel II; pero la expulsión y asesinato de los regulares, la demolición y venta de sus conventos y bienes, la venta de las alhajas y bienes de las iglesias y clero secular, la persecución de los obispos y cabildos; los atropellos y vejámenes que sufría la Iglesia por parte del Gobierno de Madrid, no pudiendo tolerar tantos excesos como entonces se cometieron, obligaron al papa Gregorio XVI, á retirar su Nuncio de la corte de España y se negó á reconocer ninguno de los actos de la Regencia y sus Gobiernos, quedando interrumpidas las relaciones que mediaban entre Roma y España hasta el advenimiento de Pío IX al trono pontificio, que volvieron á reanudarse; razón por la cual quedó sin efecto la elección y presentación para el obispado de Osma, hecho á favor del Ilmo. Sr. Barragán, dignísimo prelado de esta diócesis que falleció en ella el 14 de Agosto de 1846, habiendo gobernado su iglesia diez y seis años. En su largo pontificado trabajó con celo apostólico en bien de la grey que le estaba encomendada, apacentándola con su doctrina y ejemplo; miró siempre con singular predilección todo cuanto estaba confiado á su sagrado ministerio, y por su muerte demostró el paternal cariño que en vida profesaba á los pobres y   —423→   necesitados, pues dejó todos sus bienes y ahorros para que se fundase un Banco de pescadores y un colegio de 2.ª enseñanza para los jóvenes que quisieran seguir la carrera eclesiástica y asistieran de capellanes de coro y acólitos en la catedral, dotando además, en el Sacro-Monte de Granada, una beca para un pobre hijo de esta ciudad. Su cadáver se halla sepultado bajo el arco central del crucero de la Santa Iglesia.

Este señor fué el último obispo propio de esta diócesis, hallándose vacante hasta el día; pues conforme con el Concordato de 1851, ha de reducirse á colegiata y establecerse en ella un obispo auxiliar de la de Cádiz.






ArribaSres. Obispos administradores apostólicos de Ceuta


Ilmo. Sr. Dr. D. Francisco Ildefonso Infante y Macías

Nació en 31 de Mayo de 1813, en Moguer; fué benedictino, rector del Seminario de Cádiz, maestrescuela de la catedral de Segovia. En Febrero de 1876 fué consagrado Obispo de Claudiópolis, in partibus infidelium, y tomó posesión de la diócesis de Ceuta como administrador apostólico de la misma. En Mayo de 1877 fué trasladado á la diócesis de Tenerife, la que renunció en 1887, muriendo el día 2 de Julio de 1888 en Moguer, donde se había retirado. En su sufragio, por disposición del Ilmo. Cabildo, el día 21 del expresado mes de Julio se celebraron solemnes honras.




Excmo. é Ilmo. Sr. D. José Pozuelo y Herrero

Natural de Pozoblanco en la diócesis de Córdoba, donde nació el 2 de Julio de 1828. Fué canónigo y provisor del obispado de Almería, y siendo después canónigo de la Santa Iglesia catedral de Córdoba y rector del Seminario de San Pelayo, fué nombrado por Su Santidad administrador apostólico de Ceuta el 27 de Mayo de 1877; preconizado en Roma para el obispado de Antípatro   —424→   in partibus infidelium el 26 de Junio del mismo año, consagró el 8 de Enero de 1878. Desempeñó la administración apostólica de Ceuta hasta que fué nombrado Obispo de Canarias en 1879, esto es, desde 23 de Junio de 1877 hasta 28 de Febrero de 1879.




Excmo. é Ilmo. Sr. Dr. D. Jaime Catalá y Albosa

Natural de Arenys de Mar, obispado de Gerona, provincia de Barcelona. Nació el día 1.º de Noviembre de 1835. Terminada su carrera literaria en el Seminario de Gerona, fué nombrado profesor en el mismo el año de 1859 y después vicesecretario del Excmo. Sr. Arzobispo de Tarragona, Sr. Costa y Borrás. Fallecido este en 1865, pasó á Madrid donde entre otros cargos importantes ejerció los de secretario general contador de Santa Cruzada y el de abreviador del Tribunal de la Rota. En 28 de Febrero de 1879 fué preconizado Obispo de Cádiz y en Junio del mismo año fué nombrado administrador apostólico de esta diócesis de Ceuta. En Octubre de 1882 giró en esta diócesis su santa pastoral visita, en cuyo decreto general, entre otras cosas, ordenó que redactaran unos nuevos estatutos para esta Santa Iglesia catedral conformes con el derecho moderno. Redactados y aprobados por el Ilmo. Cabildo se elevaron á S. E. I. para su aprobación y decreto mandando su observancia y cumplimiento, cuyo decreto firmó en 24 de Julio de 1883. Durante su administración apostólica, adquirió esta Santa Iglesia catedral, un terno nuevo de tela de plata bordado en oro que se compró á las religiosas Adoratrices de la ciudad de Barcelona por 18.000 reales; una docena de albas de tela fina con buenos encajes, y tres piezas más de la misma tela de hilo para manteles, etc., etc., y tres cíngulos buenos. En 9 de Agosto de 1883 fué preconizado Obispo de Barcelona donde hizo su entrada el día 12 de Octubre del mismo año, cesando de su caro de administrador apostólico de Ceuta el 17 de Agosto de 1884.



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Excmo. é Ilmo. Sr. Dr. D. Vicente Calvo y Valero

Nació en Sevilla el día 10 de Mayo de 1838. Comenzó á estudiar filosofía en el colegio de San Alberto de dicha ciudad en 1848, que terminó después en el Seminario conciliar de San Isidoro de la misma. En 1856 recibió el grado de bachiller en filosofía, y en 1861 el de licenciado en Sagrada Teología. En este mismo año obtuvo por oposición el curato de Santa María de las Nieves de Sevilla y en el siguiente entró en la Universidad como profesor sustituto de Teología. En 1865 fué nombrado canónigo de la Santa Iglesia catedral de Cádiz, donde desempeñó sucesivamente los cargos de capitular contador, secretario y obrero. Entre sus servicios más eminentes debe contarse la defensa que hizo, por encargo del cabildo de los derechos de aquella corporación, atacados por los Gobiernos que siguieron á la revolución de Septiembre de 1868. En 1875 fué presentado para la silla episcopal de Santander y consagrado en la catedral de Cádiz por Monseñor Simeoni, Nuncio de Su Santidad en Madrid, el día 28 de Octubre del expresado año 1875. En 1884 fué trasladado á la silla de Cádiz, y en Agosto del mismo fué nombrado administrador apostólico de esta diócesis de Ceuta. En Agosto de 1886 visitó esta ciudad dando disposiciones para su buen gobierno. Mandó pintar al óleo y colocar en cuadros de gran tamaño, de marco dorado, el retrato de varios señores obispos que fueron de esta diócesis, que regaló después para el adorno de la sala principal de la Casa-palacio episcopal de esta ciudad. Los cuadros son diez y siete: uno de la Virgen de África, con la ciudad de Ceuta á sus pies; dos, que son los retratos de Pío IX y León XIII, y catorce que son los señores obispos que fueron de esta, á saber:

  • Ilmo. Sr. D. Antonio Medina Chacón y Ponce de León.
  • Ilmo. Sr. D. Fr. Tomás del Valle.
  • Ilmo. Sr. D. Andrés Mayoral y Zamorano.
  • Ilmo. Sr. D. Martín de Barcia.
  • Ilmo. Sr. D. José de la Cuesta Velarde.
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  • Ilmo. Sr. D. Antonio Gómez de la Torre y Javarieta.
  • Ilmo. Sr. D. Felipe Antonio Solano.
  • Ilmo. Sr. D. Fr. Domingo de Benaocaz.
  • Ilmo. Sr. D. Andres Esteban Gómez.
  • Ilmo. Sr. D. Fr. Rafael de Vélez.
  • Ilmo. Sr. D. Fr. Francisco García Casarrubio.
  • Ilmo. Sr. Dr. D. Fr. Ildefonso Infante y Macías, administrador apostólico.
  • Excmo. é Ilmo. Sr. Dr. D. José Pozuelo y Herrero, administrador apostólico.
  • Excmo. é Ilmo. Sr. Dr. D. Jaime Catalá y Albosa, administrador apostólico.

Estos diez y siete cuadros llegaron á esta ciudad bien acondicionados en dos cajas el día 1.º de Febrero de 1888, y se colocaron en la sala principal del palacio episcopal el día 6 del mismo mes. Posteriormente apareció en una casa particular de esta ciudad, el retrato del Ilmo. Sr. D. Fr. Pablo Hernández, que pintado al óleo y arreglado como los demás, de orden de S. E. I., en Mayo del expresado año de 1888, quedó también colocado en su correspondiente lugar de la mentada sala, siendo con este diez y ocho el número de los cuadros.







Ceuta, 28 de Febrero de 1890.



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